La desagradable sensación de tener el estómago o el vientre hinchado es tan frecuente que el 90% de los pacientes que consultan por problemas digestivos refieren sentirse hinchados. Y la realidad es que la mayoría de nosotros nos hemos sentido así en algún momento de nuestras vidas.
¿Pero es sólo una sensación? ¿Es normal?
Hinchazón vs Distensión
Los médicos diferencias entre ambos términos.
Dicen que la hinchazón es la sensación subjetiva (pero no por eso irreal) plenitud abdominal sin aumento de la circunferencia abdominal. Es decir, nos sentimos hinchados pero el abdomen no se ve hinchado. Esta sensación de tener un globo en el estómago es experimentada muy frecuentemente por mujeres (80% de los casos de consultas).
Cuando hay distensión abdominal, hay un aumento objetivo del contorno abdominal, es decir, el vientre sí se observa hinchado.
En casi la mitad de los pacientes, la hinchazón va acompañada de distensión abdominal. Pero en el resto, existe sólo la sensación de hinchazón.
No están muy bien dilucidados los mecanismos de estas dos condiciones, pero se cree que tenemos la sensación de hinchazón porque las vísceras son hipersensibles a la presencia de gases, líquidos o heces y cuando aumentan desencadenan rápidamente esta sensación.
En el caso de la distensión abdominal se cree que se desencadena un reflejo afecta el tono muscular de la pared abdominal y diafragma. Esa relajación muscular puede aumentar el contorno del abdomen hasta en 10 o 12 cm.
En resumen, podemos decir que la hinchazón es el síntoma y la distensión es el signo.
¿Normal o Patológico?
El sentido común indica que, si nos damos una comilona, nos sentiremos hinchados hasta que los órganos digestivos trabajen sobre esos alimentos, descomponiéndolos, absorbiendo lo que es necesario y eliminando el resto. Durante este proceso, se suele experimentar la sensación de gases.
Si la hinchazón está relacionada con una ingesta excesiva de alimentos se dice que es funcional, es decir, normal. También se la considera normal cuando ocurre justo antes de la menstruación. De hecho, un 30% de la población en general sufre de hinchazón abdominal en algún momento de su vida y de estas personas, el 75% son mujeres.
Si la hinchazón con o sin distensión ocurre más de 1 vez por semana, durante al menos 3 meses, se hace necesaria una consulta médica para analizar las causas.
Causas de la hinchazón o distensión
1- Síndrome del Intestino Irritable o SII:
Es la causa más frecuente de hinchazón o distensión abdominal. También conocido como Síndrome del Colon Irritable, es un trastorno funcional digestivo muy común que provoca los signos mencionados, además de molestia o dolor abdominal, diarrea o estreñimiento.
No se conoce exactamente las causas de este síndrome, y se diagnostica en general observando los síntomas. Sí se sabe que el 75% de las personas que padecen de SII sufren de hinchazón y distensión. No es una enfermedad que acorte la vida o provoque otras patologías, pero sin duda afecta la calidad de vida.
No hay medicamentos específicos para este síndrome, pero algunas personas lo controlan a cambiar su dieta. También ayuda incorporar a la vida diaria infusiones o tés que normalizan la digestión y eliminan la hinchazón abdominal.
2- Los gases:
Cuando hablamos de hinchazón, siempre le echamos la culpa a los gases. Es que durante mucho tiempo hasta los médicos creían que el exceso de gases era el problema. Pero con los modernos sistemas de diagnóstico por imágenes ha quedado claro que estos pacientes no tienen muchos gases, sino problemas para distribuir y hacer transitar los gases por estómago e intestino.
Los gases se producen por fermentación de carbohidratos, y algunas personas son más sensibles a la presencia de gases, manifestando esa sensación de hinchazón.
Por otro lado, puede existir una intolerancia o hipersensibilidad hacia ciertos alimentos, como por ejemplo:
- Granos/Leguminosas: guisantes, lentejas, garbanzos, frijoles;
- Vegetales verdes: repollo, brócolis, col de Bruselas, la familia de los coles en general;
- Alimentos ricos en fructosa: alcachofa, cebolla, peras, trigo y refrescos;
- Lactosa, el azúcar natural de la leche;
- Alimentos ricos en almidón: maíz, pasta y papas;
- Alimentos ricos en fibras solubles: salvado de avena y frutas;
- Granos integrales: arroz integral, harina de avena y harina de trigo integral;
- Sorbitol y xilitol, que son edulcorantes naturales;
Se recomienda modificar la dieta eliminando un grupo de estos alimentos hasta encontrar cuáles son los “culpables” de la producción de gases y mala distribución de los gases.
3- Problemas en columna y músculos:
Recientemente se ha sugerido que la lordosis lumbar y una falta de tono muscular en abdomen podrían tener un papel importante en la hinchazón y distensión abdominal.
Aparentemente existe un reflejo innato que hace que los músculos abdominales y los que sostienen la columna se ajusten según la presión que es necesaria para cada paso de la digestión. Una debilidad en esta zona produciría la demora en la digestión con la sensación de hinchazón incluida.
De hecho, se sabe que el ejercicio físico y en especial los refuerzan los abdominales ayudan a la digestión y a combatir el estreñimiento.
4- Flora intestinal:
Se llama microbiota o flora intestinal al conjunto de bacterias que habitan el intestino en una persona normal. Se calcula que nuestro intestino tiene unas dos mil especies de bacterias diferentes.
Los tipos de bacterias son muy variables de una persona a otra y la gran mayoría son beneficiosas para nuestra salud. Sus funciones también son diversas: actúan sobre el sistema inmune, producen vitaminas y digieren alimentos que no fueron descompuestos en el estómago como los polisacáridos (almidón). Esta digestión produce gases y normalmente se eliminan por el equilibrio constante de esta flora.
Cuando se altera ese ecosistema, los gases pueden tardar en eliminarse, con lo que provocan hinchazón abdominal.
El uso de pro bióticos como los que contienen ciertos yogures puede ayudar en algunos casos pero su eficiencia no es concluyente.
Tratamiento de la hinchazón y la distensión abdominal:
Como mencionamos, no existe un tratamiento específico para estas dos condiciones, sino que se trata de modificar la dieta, eliminando los alimentos que podrían ser los causantes.
Cuando hay estreñimiento se suele recetar un laxante suave, como las infusiones de cáscara sagrada, lino o ruibarbo o un buen té desintoxicante. En Sweetea te hemos preparado esta guía que te ayudará a eliminar la hinchazón y a normalizar tu metabolismo.
Fuentes:
Bloating y distensión abdominal: ¿Solamente gas?
Hinchazón/distensión funcional
Distensión abdominal: un enfoque fisiopatológico.
Hinchazón abdominal funcional con distensión