Dependiendo del gusto de la persona, es casi inimaginable partir el día sin una taza de café o una deliciosa taza de té. Sin duda ambas nos ayudan a despertar y partir el día de la mejor manera, llenos de energía, rejuvenecidos y listos para afrontar las aventuras laborales, sin embargo estas dos famosas bebidas tienen importantes diferencias y beneficios que todo/as deberíamos saber.

Este artículo no es un debate para elegir uno del otro, sino para mostrar las diferencias entre el café y el té y sus distintos beneficios generales.

6 diferencias entre el té y el café

1. niveles de cafeína

Esta es la diferencia más importante entre ambas bebidas. El té y el café contienen cierta cantidad de cafeína (en el caso del té se le dice teína aunque químicamente es la misma molécula). El café supera al té en cantidad de cafeína y su manera de estimular es distinta. Por ejemplo, los niveles de teína en una taza de té negro son de 55 miligramos aprox., mientras que el de una taza de café es de 125 a 128 miligramos aproximadamente. 

La teína del té se absorbe de manera más lenta que la cafeína, esto es debido a la gran cantidad de taninos en el té que ayudan a que la absorción sea lenta y de forma más prolongada. 

El contenido de teína del té ayuda a aumentar los niveles de concentración, en cambio, la cafeína del café despierta desde la ansiedad y la aceleración, ya que se absorbe de forma mucho más rápida y en una menor duración. Los efectos estimulantes se producen casi inmediatamente  y de forma más fuerte.

2. Sabor

Al comprar el té y el café, el sabor es probablemente lo primero que se nos viene a la mente. 

El café viene de distintas partes del mundo y en su gran mayoría su sabor se caracteriza por ser fuerte y amargo. El café es más acido que el té, esto quiere decir que puede tener un impacto mayor en algunos estómagos sensibles, causando acidez y otros síntomas. 

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3. Te vs Café: Beneficios físicos

El té tiene variados beneficios físicos: Reduce el riesgo de ciertos tipos de cáncer debido a su gran cantidad de antioxidantes. Posee propiedades anti-inflamatorias gracias a los polifenoles en las hojas de té y analgésicos que nos ayudan a aliviar síntomas molestos de algunas dolencias o incluso ayuda a aliviar los dolores de la artritis. El té mejora la sensibilidad a la insulina y baja los niveles de azúcar en la sangre ayudando a prevenir el desarrollo de diabetes tipo 2. Potencialmente también ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y mejorar los niveles de colesterol. 

El café por otro lado no solo es cafeína, sino que contiene nutrientes clave para el cuerpo como potasio, manganeso y niacina. Además, ayuda a reducir los riesgos de diagnosticar diabetes tipo 2. Protege el hígado reduciendo la probabilidad de desarrollar cirrosis. Al igual que el té, el café protege contra ciertos tipos de cáncer gracias a sus antioxidantes. 

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4. Café vs té: Beneficios mentales

El café reduce los riesgos de alzheimer, parkinson y ayuda con la depresión, de acuerdo a variados estudios. 

El té por su parte protege también contra enfermedades neurodegenerativas como el alzheimer y parkinson gracias a su componente catequina. 

Si bien se necesitan muchos mas estudios, hasta el momento estas conclusiones en general se han realizado comparando grupos de personas que toman regularmente estas bebidas vs otras personas que no beben. 

5. Propiedades antioxidantes

Ambas bebidas, el té y el café poseen propiedades antioxidantes que nos ayudan de sobremanera a nuestro organizamos. El té contiene variedad de antioxidantes que protegen nuestras células y al organismo de distintas enfermedades, incluso del estrés o depresión producido por los mismos radicales libres, reduce los niveles de colesterol en la sangre y regula el azúcar, el café también ayuda a regular el azúcar en la sangre y también puede prevenir los cálculos biliares.

6. Higiene bucal

El café es conocido por manchar los dientes con un tono amarillento, al contrario del té que contiene flúor, ayuda a la prevención de bacterias bucales, limpieza y mal aliento.

7. Calidad en el sueño

Otra de la diferencias suceden cuando nos vamos a la cama de noche. Aunque ambas bebidas despiertan en la mañana, nos mantienen alerta y concentrados, las personas que toman café les cuesta conciliar el sueño, los que beben té al contrario suele conciliar el sueño de forma más rápida, relajada y prolongada.

Otras diferencias entre el café y el té

• El café se extrae de granos, mientras que el té se realiza con hojas
• El té fue descubierto 3000 años antes que el café
• El modo de preparación del café es más compleja que la del té

Siempre cabe mencionar que hay distintos tipos de té y distintos tipos de café que pueden afectar de diferentes formas a las personas, si no se toma de forma correcta, nada en exceso es bueno. Cada uno conoce su cuerpo y sus gustos, puede elegir té o café y buscar cual es que le hace mejor, se pueden tomar fríos o calientes, agregar distintos ingredientes para incrementar el sabor y sus beneficios para la salud, siempre serán las bebidas más populares y más consumidas.

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Fuentes: canalnutrición / sabrosia / paleohacks